02 Mar 2023
El bardo y la musa
María Antonieta Rivas Mercado nació en 1900, hija del destacado arquitecto y escultor Antonio Rivas Mercado (el creador del Ángel de la Independencia), recibió la mejor educación para una mujer de esa época: practicó la danza y hablaba inglés, francés, alemán, italiano y griego. A los dieciocho años, se casó con Albert Edward Blair, con quien tuvo a su único hijo, finalmente se separaron y él obtuvo la custodia del niño.
Fue una gran mecenas de los artistas e intelectuales de la época: fundó el Teatro Ulises y formó el patronato para la Orquesta Sinfónica de México, bajo la dirección de Carlos Chávez. Además, se convirtió en mecenas de personajes como Andrés Henestrosa, Xavier Villaurrutia, Salvador Novo, Gilberto Owen, Celestino Gorostiza y María Tereza Montoya. En ese ambiente conoció a su gran amor, José Vasconcelos Calderón, el iniciador de las campañas de alfabetización y el principal impulsor de la construcción de escuelas en el México post revolucionario.
Impresionada por el escritor y diplomático, Antonieta tuvo un papel destacado en su candidatura presidencial y fue su compañera sentimental, a pesar de que él estaba casado. Al ser derrotado, Vasconcelos se autoexilió en París. Ella no lo pensó dos veces y se fue con él, pero antes sustrajo a su hijo de la casa paterna y lo llevó con ella a Europa, donde trabajó como escritora y periodista.
Pero pronto “el Bardo” dejó de mostrar interés por ella. Un día Antonieta le preguntó si aún la amaba o si, al menos, la necesitaba. Él le contestó que no y, además, le expresó su necesidad de volver con su esposa a México, donde le ofrecían el puesto de Rector de la Universidad Nacional.
Desolada, Antonieta se suicidó el 11 de febrero de 1931 dentro de la Catedral de Notre Dame, con la pistola que Vasconcelos siempre llevaba consigo. Se pegó un tiro en el corazón. Su vida y su trágica muerte inspiraron la cinta “Antonieta”, dirigida por el español Carlos Saura y con la actriz francesa Isabelle Adjani en el papel principal.